domingo, 26 de junio de 2011

Para ti que no me lees...

La vida da vueltas, nos maltrata, nos tira, nos golpea, pero también nos abraza, nos acaricia, nos da todo, la sensación que se tiene de amar y de ser amado es el gran premio de todo, el sentir el triunfo por obtener lo que buscábamos, lo que esperábamos y lo que anhelábamos, el secar una lagrima de dicha y no de dolor ni de desilusión, el sentir el abrazo cálido y sincero, el morir de risa por una tontería, el poder ver que creías lejano y que tanto buscabas frente a ti, se encontraba desde hace tiempo a un costado tuyo. La intensa angustia es vencida por la tranquilidad de tener seguridad de un apoyo amable. El sentir la pasión y la extraña sensación de extrañar, el ver nuevamente alguna estrella, la luna, un ave, la lluvia, sentir el frio y el calor a lado de alguien. El recordar una fecha, una palabra, una prenda, un beso, una caricia, una melodía, el inventar un juego, el saber que siempre ríes, el saber que lo bello de todo es el sentido recíproco, el sentir confianza y decir cualquier cosa sin importar lo que sea, el sentir curiosidad por tu tiempo, el respetar, el sentimiento de que te escuchan con atención, y el querer escuchar.

El notar la belleza de una mirada, lo bello del tono de tu voz, lo lindo de un solo cabello, lo apasionante de tu aliento, el sentir lo intenso de un solo de tus besos, lo suave de tu piel, la grandeza de tu ser, la sonrisa que desprende mil encantos, mis suspiros que nacen por tus gracias, el conocer tu humildad es el tesoro mas grande.

Te amo, a ti que no me lees…